Pere Esteve, Descanse en Paz

Era el sucesor natural en CiU, después de tomar el relevo de Miquel Roca Junyent que se desmarcó también por desavenencias con Jordi Pujol.

Pere Esteve, hombre de convicciones, carácter i carisma, dio la primera lección al dar un paso atrás para que el delfín designado por Jordi Pujol, Artur Mas, accediera a la primera línea de la escena de CDC y del gobierno de CiU. Y en su desmarque devino europarlamentario que es el destino natural de los que se salen por la parte de arriba de los organigramas políticos.

La distancia le ayudó en su reflexión y posicionamiento político y decidió dejar CDC: cargos, emolumentos y todo lo que pudiera ligarle a su inmediato pasado político, dando otra lección de modos y coherencia.

En aquel momento de su sonora dimisión, tomé contacto electrónico con él, a fin de solidarizarme con la coherencia de su postura y darle apoyo moral y político si lo necesitara. Mantuvimos una cierta correspondencia electrónica y me invitó a la presentación de su proyecto Catalunya 2003, del que me había anticipado información.

Asistí a la presentación del proyecto y al confirmar que se trataba de un movimiento independentista que no es de mi interés, abandoné el seguimiento y cuando posteriormente se alineó con ERC, dejó definitivamente de interesarme su mensaje político, aunque atendía con detenimiento sus apariciones en los medios.

Recibí como un golpe la noticia de su enfermedad y seguí con interés personal su evolución. Celebré su cargo de Consejero de Comercio y Turismo en el gobierno tripartito de Maragall y creo que empezó una sensata trayectoria de gestión en el departamento que debió dejar al cabo de un año por culpa del progreso de su enfermedad.

La noticia hoy de su muerte me ha conmovido; hemos perdido a un buen hombre y un político de altura, todo y con no compartir sus planteamientos políticos de su transición.

Pere Esteve, descanse en paz.