Monday, January 28, 2008

Desplome de bolsas; Cambio Climático y chalaneo

Hemos asistido esta pasada semana a unas severas oscilaciones, por decirlo de forma menos inquietante, de las bolsas de todo el mundo, como no se veía desde hacía 16 años. Como cabía esperar, lo que se inició como una crisis financiera en EE.UU. a raíz de las hipotecas subprime que, dicho sea de paso, tratamos precozmente en esta sección el 7/V/2007 advirtiendo de lo que se avecinaba, acabó por desembocar en lo que se ha vivido en los parquets de todo el mundo. Los gobiernos han puesto paños calientes según su conveniencia, porque lo que se dice resolver, no han resuelto nada; el mercado se ocupará de sí mismo.

En efecto, la Reserva Federal (banco central) de EE.UU. ha bajado el tipo de interés en 0,75 puntos equivalente a una reducción del 17,65%. Parece que no les preocupa la inflación. Pero además, han inyectado dinero en el sistema por la vía de una reforma fiscal urgente para que los consumidores puedan seguir consumiendo y no pare la rueda. Ya lo comentamos aquí también el 16/IV/2007; no insistiremos en la obviedad, pero a la administración americana le ha costado un año reaccionar y ya se sabe que peor que una mala decisión es no tomar ninguna. Aunque tomar esta de Bush, mala y fuera de plazo, es de perdidos al río.

En España las autoridades gubernamentales y muchas civiles se aprestan a decir que nuestro sistema bancario no contempla las hipotecas subprime ¡Menudo alivio, oiga! Pero es que en EE.UU. tampoco. Esos créditos hipotecarios los conceden empresas privadas ajenas al sistema bancario; no sé si usureros, prestamistas o simplemente benefactores de gran prudencia, pues dan crédito a quien no lo da la banca, pero con garantía hipotecaria, eso sí.

Luego esas hipotecas van al redescuento a la banca apoyadas en la solvencia del prestamista y cuando un banco tiene gran cantidad de ese papel, lo reconvierte mediante titulaciones (títulos para inversores) que mezcla con otros títulos y devienen productos derivados y estructurados, como instrumentos de inversión o de cobertura. Y ya está hecha la pelota que al ir de banco en banco es como la bola de nieve, dicho de una forma fácil y directa.

Ahora los bancos no se fían unos de otros por haberles vendido productos viciados y no se prestan dinero para cubrir sus propias necesidades y los coeficientes de caja.

El Banco Central Europeo no ha bajado los tipos de interés. Como no es una medida popular, muchos sectores y de prensa se apresuraron a censurar a su presidente, Jean-Claude Trichet, por mantener el tipo y tratar de controlar la inflación. Ahora, una vez informados, ya dicen que ha actuado bien.


Pero no siempre la Unión Europea actúa bien a mi juicio. José Manuel Durấo Barroso, presidente de la Comisión Europea, acaba de presentar un paquete de medidas para contener las emisiones de gases invernadero generadas por el hombre, en la errónea creencia que son el origen del calentamiento global, para la reducción de tales gases y llegar a la convergencia de lo convenido en el protocolo de Kioto.

Entre las medidas, todas ellas extraordinariamente costosas para las empresas, en beneficio de las grandes multinacionales que les venderán los dispositivos para la reducción de sus emisiones, está la de subastar los derechos de emisión de gases. La CE ha aprobado que se pueda comerciar con tales derechos.

Como indica la Comunicación de la Comisión al Consejo y al Parlamento Europeo sobre políticas y medidas de la UE para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero: hacia un Programa Europeo sobre el Cambio Climático (PECC), el comercio de derechos de emisión es un sistema que permite asignar a las empresas cuotas para sus emisiones de gases de efecto invernadero en función de los objetivos de sus respectivos Gobiernos en materia de medio ambiente.

Genial; si una empresa no contamina, puede venderle su “derecho a contaminar” a otra, a la que le sale más barato chalanear en este asunto que procurar contaminar menos. En otra época, en nuestro país, a muchas empresas les salía más a cuenta pagar las sanciones por contaminación que ponerle remedio. Eso ya pasó, pero costó llegar a ello; ahora se propicia.

Es cierto que hay que contaminar menos y si ese es el objetivo, habrá que cumplirlo; pero cada uno por sí, pues por este procedimiento que ahora se ha aprobado, entramos en la reventa de la aplicación de procesos menos contaminantes. Como van a ser muy caros, de ahí el negocio de tales proveedores, quien por ingenuidad o convicción los aplique a su industria, podrá luego “revenderlos” por la vía de la cuota de contaminación.

Es lo que vienen proponiendo empresas de la envergadura de DuPont que contamina enormemente y como tiene plantas en distintas partes del mundo con diferentes niveles de contaminación permitida, lo que no “contamine” en una que le sirva para otra; que se comercie con ello.

Parece como un severo despropósito en todo este contexto. Tal vez sea porque en la Comisión Europea no llegan a creérselo y, como indica la misma comunicación de la Comisión al Consejo, se trata de un sistema muy práctico, ya que permite a las empresas superar su cuota de emisiones a condición de que encuentren otras empresas que produzcan menos emisiones y les vendan sus cuotas. Por una parte, dicho sistema ofrece cierta flexibilidad –persevera la Comunicación– sin ningún perjuicio para el medio ambiente. Además, fomenta el desarrollo de nuevas tecnologías. Las empresas, motivadas por los beneficios que obtienen de la venta de sus derechos de emisión, desarrollan y utilizan tecnologías limpias.

Es como el final de la película “Patrimonio Nacional”, de Luis García Berlanga, donde el Marqués de Leguineche (Luis Escobar) se hacía subir todos los días la comida a casa desde el bar de la esquina y también decía: “Es un sistema muy práctico: me suben la comida con un ticket que añaden a los anteriores y así vamos todos muy bien”. Los tickets no los pagaba nadie, claro está.

Aviso para estudiantes próximos a entrar en la universidad: en las empresas faltarán en breve especialistas en control de cuotas de contaminación; estáis advertidos. Es una parte más del modus vivendi que se deriva del Cambio Climático.

Monday, January 21, 2008

Dice Pizarro: Ganar más y gastar menos

Tal parece que si el Partido Popular se hace con el mando de la gobernabilidad de España en las próximas elecciones del 9-M, Manuel Pizarro va a ser su padre ecónomo, como llamaban en los conventos al fraile encargado de las cuentas.

La intrusión de Pizarro en la vida política española ha sido a uña de caballo, pues el affaire Gallardón ha obligado a una omnipresencia de Pizarro, rayana en la ubicuidad, para que el fichaje del PP eclipsara la salida de pata de banco del alcalde de Madrid, torpemente gestionada por Mariano Rajoy.

Sea como sea, Pizarro se ha visto en la necesidad de salir a la palestra y empezar a largar y cuando se está en período electoral como es el caso y con la avidez mediática obligada por la situación, acaba uno (o empieza) por decir una obviedad tras de otra y así seguro que no se equivoca; pero se dicen simplezas.

Así, cuando siguiendo el discurso del PP y el de la calle y de la Bolsa y el de la construcción y de la banca y el de las amas de casa que no llegan a fin de mes, afirma Pizarro que la situación económica de España no es buena y que hay que prepararse para lo que aún ha de venir, los preguntadores profesionales le inquieren por sus fórmulas eficaces para hacer frente a la recesión inminente, Pizarro les responde con ese desparpajo que le caracteriza: “hay que ganar más y gastar menos”… ¡Cómo no se nos había ocurrido antes!

Qué duda cabe que Manolo Pizarro es persona preparada. Nada tiene que ver que su amistad con José María Aznar le llevara a la presidencia de ENDESA; lo ha hecho bien aunque mirase por su interés personal y el de los accionistas durante la famosa OPA. Al final les fue bien a los accionistas como era de prever en una pugna por la compra de sus acciones, pero a Pizarro le fue de perillas. Se ha publicado que fue indemnizado con 12 millones de euros por dejar la presidencia, lo que parece muy fuera de lugar, pues los nuevos accionistas eligen al nuevo consejo y los nuevos consejeros eligen al presidente de entre ellos. Al alto directivo le corresponden siete días de salario en metálico por año de servicio en la empresa, con el máximo de 6 mensualidades o así era por lo menos hasta no hace mucho. De manera que si cobraba sobre los 3 millones de euros anuales le correspondía la mitad de esa cifra.

Pero estas enormes sociedades anónimas y nunca mejor dicho anónimas, cuyos paquetes accionariales mayoritarios son gestionados por personas físicas así mismo empleadas de las corporaciones tenedoras, es lo que tienen. Porque empresario, lo que se dice empresario es aquella persona que empeña su patrimonio en el desarrollo de la empresa. Los otros son empleados que actúan como presidentes o consejeros delegados, pues en el mejor de los casos, su porcentaje en la propiedad de la empresa se mide en un cero seguido de una coma y de uno o dos ceros más antes de llegar al primer guarismo distinto al cero.

En cualquier caso, la dimensión profesional de Pizarro pasó con notable alto en su comparecencia ante el Parlament de Catalunya a raíz del apagón del verano en Barcelona, donde dio sopas con onda a sus señorías, dejando de manifiesto la diferencia, por lo general existente, entre un diputado y un profesional avezado. Haber hecho los deberes con la debida anterioridad y la preparación concienzuda de la sesión parlamentaria puso a cada uno en su lugar. Y eso que a Pizarro le tenían ganas en el parlamento catalán.

Veremos sin embargo, cómo torea Pizarro si le toca bajar a la arena de la macroeconomía; vocear desde el tendido está al alcance de cualquiera. Pero dar en precampaña alguna larga cambiada y adornarse con chicuelinas, no garantiza una faena sobresaliente ni una acertada gestión económica futura. Y si lo que está por salir de chiqueros son miuras como él vaticina, más le valdrá que se apriete los machos. Pero si fuese capaz de cuajar buenas faenas, podría tomar el sobrenombre de Manolete el Endesano.

Rodrigo Rato lo hizo bien en su legislatura y Pedro Solbes lo ha hecho bien también en la suya, pero la bonanza económica ha tocado fondo al final de su mandato y está perjudicando toda su obra. Y eso deja siempre mal sabor de boca; aunque se coma conejo.

Thursday, January 17, 2008

Centrales nucleares con energía renovada

Parece como si, de repente, comenzaran a derrumbarse las murallas de Jericó que protegían a la humanidad de las centrales eléctricas de energía nuclear. Al fin, algo bueno nos trae el baturrillo del cambio climático: sí a las centrales nucleares definitivamente.

El Parlamento Británico, con la aquiescencia de la oposición, como debe ser en las cuestiones importantes, aprobó el pasado jueves la construcción de hasta diez centrales nucleares en Gran Bretaña que deberán estar operativas, por el 2020. La crisis energética que tiene su origen en los inestables aprovisionamientos de gas y petróleo ha forzado al gobierno de Gordon Brown a volver a la energía nuclear que ayudará también a alcanzar objetivos de cambio climático, dijo John Hutton, ministro de Comercio e Industria.

Por su parte, Hosni Mubarak, presidente de Egipto, ya anunció el pasado mes de octubre que el país se dotaría de centrales nucleares, después de 20 años de tener paralizado el proyecto. La primera de ellas podría construirse en Dabaa, en el Mediterráneo.

Obviamente, los grupos interesados en el Cambio Climático –con intereses personales y directos– tales como Greenpeace, ya han reaccionado retando al gobierno británico. El partido conservador sin embargo, liderado por David Cameron, dio la bienvenida a las opciones nucleares de Gran Bretaña, pero su asesor “verde” Zac Goldsmith atacó el nuevo proyecto.

La prensa de este pasado fin de semana está llena de opiniones, datos, estadísticas, pros y contras de la energía nuclear.

Bienvenida sea la discusión pública y abierta sobre la energía nuclear, después de treinta años de oscurantismo y engaño; de fomento del terror ante su peligrosidad promovido por la antigua URSS y los seguidores comunistas, ahora reciclados a partidos políticos verdes, los mismos que presionan sobre el calentamiento global y sus funestas consecuencias para la humanidad que lo está provocando, según ellos, para así detener el desarrollo y volver a la aldea y las cabañas, donde el comunismo tiene su caldo de cultivo y no en una economía de progreso y desarrollada, con amplios sectores de bienestar e igualdad de oportunidades.

Quiso la fatalidad que el único accidente muy grave de la Historia, en una central nuclear, se produjera el 26 de abril de 1986 en la antigua Unión Soviética, en la ciudad de Chernobil, Ucrania, alcanzándose el nivel más alto, el 7 en la Escala Internacional de Accidentes Nucleares (INES) con la muerte directa de 31 personas y 150.000 más evacuadas de la zona y muchas otras afectadas de por vida. El accidente se produjo por una maniobra mal gestionada, para la verificación de una prueba experimental con objeto de aumentar la seguridad del reactor. Qué lamentable paradoja.

El otro accidente nuclear de relevancia en la historia de la producción atómica de energía eléctrica se había producido 7 años antes, el 28 de marzo de 1979 cerca de Harrisburg, en Pensilvania, EE.UU., en la central nuclear de Three Mile Island, por un escape radiactivo a través de los circuitos de refrigeración, originado por un fallo en las bombas de alimentación de agua, que obligó a evacuar el área pero no produjo víctimas. Los propios sistemas de seguridad de la central, subsanado de inmediato un fallo humano, devolvieron el sistema a su funcionamiento normal.

Estos son los accidentes habidos en 50 años de historia de generación eléctrica mediante la energía nuclear. Todos los demás incidentes, han sido eso, incidentes. De manera que el peligro que suponen las centrales nucleares, aunque potencialmente pueda ser enorme, en la realidad de la vida, lo realmente peligroso son los automóviles que matan a decenas de miles de personas en el mundo todos los años; en la UE 45.000 muertos anuales en accidentes de tráfico y otros tantos en EE.UU. Las medidas de seguridad en las centrales nucleares las convierten en instrumentos seguros al servicio de la humanidad y apenas contaminantes en un sistema estándar de funcionamiento.

Las centrales nucleares evitan la dependencia de los combustibles sólidos y son extraordinariamente eficientes. Su implantación es más barata y mucho más rentable, habida cuenta de su larga vida útil, que la reconversión de la energía necesaria a generación “verde” o renovable que ahora se propugna, pues no deja de ser una falacia que hoy, con las energías renovables, todas ellas fuertemente subvencionadas por las autoridades al no ser rentables por sí mismas, pueda producirse la misma cantidad de energía que el progreso demanda.

La condición sine qua non que el Parlamento Británico ha puesto a la autorización de nuevas plantas de energía nuclear es que no hayan de ser subvencionadas por las arcas públicas. Los avances tecnológicos y de todo orden que se han logrado en los últimos años para la producción y distribución de electricidad, hacen innecesarias las subvenciones, pues el precio actual de las tarifas eléctricas (!) compensará en un futuro próximo, la eficiencia y calidad de la producción y distribución eléctrica. Un memorando sobre el tipo de reactor de tercera generación a ser instalado en Gran Bretaña, será puesto sobre la mesa a mediados de 2011 por el ministerio de Economía e Industria que definirá el mejor y más seguro de los reactores que pueden proveer EE.UU., Canadá, Japón o Francia.

Entre tanto, ha de seguir avanzando la Ciencia para solucionar el único problema de las centrales nucleares: la generación de residuos radiactivos. Tal vez sea ahí donde deban confluir las subvenciones a la Ciencia para dar con una solución definitiva a tales residuos.

Y mientras este nuevo escenario avanza en beneficio de toda la humanidad, los impulsores del calentamiento global habrán de urdir nuevas amenazas de la energía nuclear, pues en otro caso, las grandes multinacionales productoras de la reconversión industrial “verde” deberán en su caso redefinir sus estrategias y decantarse por la energía nuclear. Aunque en definitiva, son todas lo mismo.

Monday, January 07, 2008

La cuesta de enero

Ya se han acabado las Fiestas Navideñas, esas de las que siempre dijimos ser fechas señaladas y entrañables. Aunque siguen siendo señaladas, lo de entrañables no está tan generalizado. Ni siquiera lo de navideñas; muchos se felicitan en esta época deseándose felices vacaciones simplemente, pues van a esquiar o a Cuba, a Botswana o a la Ribera Maya aprovechando que entre un par de puentes y otro par de días cedidos de las vacaciones de verano se junta una semana de asueto nada desdeñable.

Pero todo se acaba y comienza el nuevo año para la gran mayoría del mundo occidental, pues para los chinos, el año nuevo suele estar entre el segundo tercio de enero y el de febrero, dependiendo de la luna. Aunque a efectos comerciales, todos aceptan el año occidental. Pero comercialmente, este año 2008 recién estrenado se presenta duro.

Llamamos cuesta de enero a la subida, cuesta o rampa que representa el inicio del año, luego de las fiestas, dispendios, alegrías económicas y algarabías, como si en enero el banco no fuera a adeudarnos en la VISA el sumatorio de tanto regocijo. A muchos no les importa ni les afecta, pero a la mayoría va a traerles dolores de cabeza, disgustos de pareja y discusiones con el gerente y el interventor de su agencia bancaria.

El año no ha hecho más que empezar y en nuestro país el precio de los servicios básicos que fijan las autoridades políticas gobernantes o los proveedores en connivencia con ellas, ya se ha disparado muy por encima del IPC que se ha desbocado: 4,3% para 2007, del 2% recomendado por la UE. La electricidad, agua, gas natural para uso doméstico 4,8%, bombona de gas butano 5,29%, teléfono, transporte urbano, peajes y correos.

El paro ha subido un 5,27% respecto del año anterior y la Bolsa española ha bajado severamente y la de New York se ha desplomado al conocer los datos del paro; no los de paro en España, es claro, sino los de EE.UU. cuya tasa alcanzó el 5% en diciembre.

La recesión económica se está perfeccionando.

El pasado viernes 4 de enero, el Telegraph tenía un titular que decía: “La economía en riesgo de deuda de hambre”. Los bancos en Gran Bretaña están mirando con lupa las condiciones de los nuevos créditos, ante las drásticas medidas a los prestatarios por la compra de casas y otros sectores empresariales, debido a la confusión en los mercados de dinero de todo el mundo. Será cada vez más difícil asegurar los créditos y se incrementarán las insolvencias tanto personales como corporativas, a decir del Banco de Inglaterra. Los créditos se van haciendo mucho más estrictos.

Michael Saunders, economista jefe de Citigroup, dijo que “esto es pasar del festín al hambre”. Lo que no significa que se vayan a congelar los créditos sino que sus condiciones se harán mucho más duras.

Toda la prensa del fin de semana en España, tanto la de información general como la económica, está hablando ya abiertamente de crisis económica. El gobierno de ZP sigue escondiendo la cabeza bajo el ala, pero el PP se ha destapado ya sobre este asunto y será su caballo de batalla en la campaña para las elecciones del 9-M.

El Banco Central Europeo (BCE) está amenazando con actuar contra la inflación, a fin de prevenir la espiral precios-salarios como consecuencia de la subida del IPC que en la zona euro se ha situado en el 3,1%. Los sindicatos andan ya enredando en diversos sectores, (limpieza en el metro de Madrid; conductores de autobuses urbanos en Barcelona) a fin de ir preparando al sector empresarial de cara a los nuevos convenios colectivos.

Los políticos, como el propio Jean-Claude Trichet, presidente del BCE, no quieren alarmar, pero las cosas son como son. Trichet, luego de hablar de subida de precios del dinero e inflación sin control, ponía paños calientes en Wiesbaden, Alemania, diciendo que el crecimiento económico de la eurozona es sólido pero que la inflación debe contenerse en el 2%. Y está más de un 50% por encima de lo aprobado.

Por otro lado, el precio del petróleo ha alcanzado esta pasada semana los 98,5 dólares y Chakib Jelil, el argelino actual presidente de la OPEP, ya ha dicho que la escalada de precios seguirá durante todo el primer trimestre del año 2008 y no prevé un incremento de la producción de crudo; aunque cabría plantearse un incremento de la oferta en la próxima reunión de Viena en febrero.

Y la ministra Chacón, de la vivienda, ha publicado ya los formularios para solicitar las facilidades económicas y crediticias que dará su ministerio para que los jóvenes accedan a una vivienda de alquiler y así puedan emanciparse de sus papás. Aunque probablemente los nuevos emancipados consigan pagar el alquiler y dar la fianza gracias a la magnanimidad de la ministra con el dinero de todos los ciudadanos, seguirán llevando la bolsa de la ropa sucia a casa de sus padres, pues la cosa no da para todo. Y el acceso al alquiler no es tanto la carencia de medios como la voluntad firme de hacerlo.

Aunque no se sabe cuándo van a empezar a cobrarse tales ayudas a la emancipación, como eufemísticamente denomina la Chacón a la prebenda, cabe que sea en el mismo plazo que las ayudas para la dependencia, cuya ley del ministro Caldera, de Trabajo y Asuntos Sociales, fue mucho anterior y los destinatarios no han visto aún tales ayudas.

Si esperan conseguir los votos de todos esos beneficiarios vale más que empiecen a emitir las transferencias bancarias; y aún así, dudo mucho que voten a ZP por ello.

En cualquier caso, es manifiesto que la cuesta de enero tiene una pendiente este año 2008 superior al 45% y habrá que meter la reductora para superarla; el que tenga reductora, por supuesto, pues la mayoría de los mortales vamos siempre en directa. Y así, no subiremos la cuesta.